Cierre de temporada: cómo preparar tu piscina en Salamanca

El verano en Salamanca se vive alrededor de la piscina: días largos, calor intenso y baños refrescantes. Pero cuando llega septiembre, toca pensar en el invierno. El clima salmantino, con heladas habituales y cambios bruscos de temperatura, hace que cerrar bien la piscina sea imprescindible para evitar daños y costes extra en primavera.

Limpieza a fondo antes de cubrir

El primer paso es dejar la piscina impecable:

• Aspira fondo y paredes para eliminar hojas, arena y suciedad acumulada durante agosto.
• Cepilla bordes y juntas, donde la cal y la suciedad se incrustan fácilmente.
• Vacía cestos de skimmers y prefiltro: las heladas convierten los restos orgánicos en un problema doble.

Ajuste químico del agua

El agua no debe quedarse “como está”. En zonas de invierno frío es aún más importante equilibrarla bien:

• pH entre 7,2 y 7,6.
• Cloro de choque para desinfectar a fondo.
• Algicida de larga duración que actúe durante meses.

Un agua bien tratada en septiembre puede llegar a marzo en perfecto estado.

Bajar el nivel del agua

No es necesario vaciar la piscina por completo. Lo ideal es dejar el nivel unos 10 cm por debajo de los skimmers.

• Así evitas que el hielo dañe el sistema de filtración.
• Si tu piscina tiene rebosadero, asegúrate de que quede protegido frente a heladas.

Proteger tuberías y maquinaria

En Salamanca las heladas nocturnas son frecuentes incluso desde noviembre. Por eso es fundamental:

• Vaciar tuberías y purgarlas si la instalación no va a usarse.
• Dejar seca y limpia la bomba de filtración.
• Guardar accesorios (escaleras, limpiafondos, duchas) en un lugar cubierto.

Colocar la cubierta adecuada

La cubierta no es un extra: en un clima frío es imprescindible.

• Las cubiertas de seguridad son perfectas si hay niños o mascotas.
• Una cubierta opaca bloquea la luz solar y evita algas durante los meses de reposo.
• Si prefieres una cubierta ligera, revísala con frecuencia, porque la nieve o el granizo pueden acumular peso.

Revisiones de invierno

Aunque cierres tu piscina, no la olvides hasta junio. En Salamanca, las lluvias y las heladas pueden alterar el nivel del agua o dañar la cubierta. Recomendamos una revisión rápida cada mes:

• Comprueba que la cubierta está bien tensada.
• Vigila el nivel de agua.
• Retira hojas o suciedad acumulada.

Cierre

Cerrar la piscina en Salamanca no es un lujo: es una necesidad. Con heladas que pueden ser intensas en invierno y cambios bruscos de temperatura, una piscina mal protegida puede sufrir daños costosos.

En Brown Piscinas & Jardines nos encargamos de todo: limpieza inicial, equilibrado del agua, protección de tuberías y colocación de cubierta. Así, cuando vuelva el calor, tu piscina estará lista para disfrutar desde el primer día.